viernes, 23 de diciembre de 2016

Mejora lo bueno

Nota:  estuve varias semanas atendiendo asuntos personales y académicos y encargos de Charitinas.  Lo lamento.  Vuelvo a la carga con energías renovadas, algunas cosillas ventiladas y varios exámenes aprobados.

Te recomiendo la lectura Quédate con lo bueno de mi otro blog Divina Valentina.

No siempre todo es maravilloso.  Procura quedarte con lo bueno.  Pero si algo no es todo lo bueno que quieres … ¿porqué no lo mejoras?

Mi ordenador portátil es un HP Pavilion con unos añitos.  Sinceramente, es un fiasco de ordenador.  No me gusta nada de él:  desde la gestión del sistema operativo al teclado birrioso, pasando por la gestión de recursos o lo defectuoso de sus puertos USB.  Para colmo, la tapa del portátil es pulida, y se raya con muuuucha facilidad.

No sabía cómo arreglar ese aspecto tan desastroso y me puse en contacto con mi yo artesano Charitinas.  Pero tampoco se me ocurrió mucho.
Hablando con Carmen, de Manualidades Carmen Carranco, me descubrió la solución:  hacerle decoupagé con papel de arroz o servilletas.
Después de comprarle unas servilletas divinas de rosas en tropel, al final me topé con un gran papel de arroz de uno de mis artistas favoritos:  Alfonso Mucha.  Y el diseño escogido disimula el logotipo HP del centro de la tapa.

Siguiendo los consejos que anoté de las clases anteriores con Carmen Carranco, toda una profesional, apliqué el papel centrado y logré que tapara todos los arañones de la tapa.  Una vez seco, decoré un poco con pintura metalizada en relieve y algún que otro toque de barniz dimensional.  Por último, una buena capa de barniz protegerá mi diseño.

 Os dejo algunas fotos donde de la tapa del portátil completa y también de los detalles en relieve.

Charitinas, ordenador personalizado





¿Qué os parece?
En dos ratos conseguí un resultado sorprendente, único y, desde luego, mejor.  Sin cambiar de ordenador, sin gastar en productos caros, usando material que ya tenía, … me quedo con lo bueno.

Quédate con lo bueno.  Y si no ves lo bueno, pónselo tú ... o encárgaselo a Charitinas, caprichos artesanos.


Feliz Navidad, mis Valerines

Quédate con lo bueno

Nota:  estuve varias semanas atendiendo asuntos personales y académicos y encargos de Charitinas.  Lo lamento.  Vuelvo a la carga con energías renovadas, algunas cosillas ventiladas y varios exámenes aprobados.



Quédate siempre sólo con lo bueno.
   Cuando te despiertes temprano y te pese el sueño en los párpados, recuerda que hoy también te has despertado … y eso es bueno.
   Cuando tengas que levantarte temprano, recuerda que te puedes levantar … y eso es bueno.
   Cuando tengas que ir al trabajo, recuerda que tienes trabajo … y eso, aunque no lo creas, es bueno.
   Cuando no sepas qué ropa ponerte para salir, recuerda que tienes donde escoger … y eso es bueno.
   Cuando te preocupe la dieta, recuerda que tienes comida … y eso es realmente bueno.
   Cuando te canses de quien te recuerda que te pongas el cinturón de seguridad, y que llames cuando llegues, piensa que eso es que te quieren … y eso es bueno.
   Cuando llegas cansado a casa, recuerda que hiciste mucho hoy, y que tienes casa … y eso es bueno.

La familia llega en Nochebuena con esas reuniones de cuñados pesados … y mejor no hablamos de las suegras ... y las cuñadas cotillas y los hermanos que sólo saben poner pegas después de todo el esfuerzo que hiciste para atenderlos.  Recuerda que tienes familia que aún quiere estar contigo ese día de Navidad … y eso es bueno.

   A lo mejor tu vida te parece un asco, pero tienes muchas cosas buenas … y si no son tan buenas … no todo es malo.  Tú quédate con lo bueno … y aprende del resto … y poder aprender es bueno.

   No siempre todo es maravilloso.  Procura quedarte con lo bueno.  Pero si algo no es todo lo bueno que quieres … ¿porqué no lo mejoras?

¡Feliz Navidad, mis Valentines!