¿No os ha pasado nunca que sentís que alguien os estrena?
¿Y acaso no tenéis la necesidad urgente de dejaros violar los sentidos?
Pues eso: que no hay pasado que no se olvide en un beso que no tiene prisa.
Que viniste tú, la tentación más oculta y radiante. Y se quebraron los mitos, crujieron las ideas y temblaron las bases.
Y al final de mis precipicios, siempre estaba tu imagen de virtud ... esperándome.
Que os mantengáis puros de corazón, mis Violetines.
No hay comentarios:
Publicar un comentario